Bueno bueno bueno el planazo de ayer. Fui a ver un partido de rugby, algo que quería hacer en Australia pero no pensaba que fuese a ser tan pronto. Surgió así, y sin tener yo ni idea de rugby, ni de deporte en general, me planté en el Suncorp Stadium de Brisbane para ver lo que resultó ser un partido importante. Broncos Brisbane y South Sidney Rabbitohs, equipos por lo que se ve bastante importantes aquí, daban (por lo que me habían dicho) comienzo a la temporada de la liga y montaron un tinglao que no veas. ¿Que no tengo yo ni idea de rugby y me meto en Australia a ver un Barsa – Madrid australiano? Pues puede ser. Pero me lo pasé pipa. En este post te cuento cómo es ver un partido de rugby en Australia, cuánto me costó y cómo fue la experiencia.
Cuánto cuesta ver un partido de rugby en Australia
Pues depende, como todo. En otras ciudades o estadios no lo sé, yo te cuento lo que costaban en este partido en concreto en Brisbane. Porque esa es otra, dependerá también de cómo de importante sea el partido.
El precio de las entradas para ver un partido de Rugby (aparte de como te decía, dónde y qué partido sea), va a depender de cómo de cerca quieras estar del campo. ¿Me importaba a mí el partido o tenía algún tipo de idea sobre rugby? Pues evidentemente no, así que me daba exactamente igual dónde me colocaran. Sí, como habrás podido imaginar cogí las más baratas que había y con gastos de gestión y esas cosas, me costaron 32 AUD, unos 21€. Bastante bien para el show que presencié. Las compré online en la página web del estadio el mismo día unas 3 horas antes.
Estábamos donde cristo perdió las chanclas, vale, sí, pero el espectáculo lo disfrutamos igual, y yo quiero pensar que así teníamos una panorámica de todo el campo. Eso sí, nos tocó en campo enemigo porque por supuesto, íbamos con los Broncos de Brisbane pero en esta zona, todos eran «rabbitohs».
Eso sí, si quieres tomarte alguna cervecilla o picar algo, ya es otro cuento. A 10 AUD la cerveza (unos 6€).
Organización del evento
Ya te digo que tenían una montada que no veas. Para ser exactos, porque lo dijeron, había un total de 35.507 personas, y me sorprendió bastante la organización (no sé si esto pasa en todos los partidos de todos los deportes, no habitúo este tipo de eventos).
En las afueras del estadio había muchísimas actividades: un ajedrez gigante, un rocódromo, un aro de luz giratorio, una zona chillout, puestos de merchandising y de apuestas…
Pero es que una vez dentro, había hasta puestos para cortarse el pelo. No vaya a ser que te pille el partido despeinado. Además de lo obvio, varios bares de cerveza y perritos calientes.
Algo que me llamó la atención y que me pareció estupendo, es que desde que termina el partido durante una hora, el transporte público es gratis con la entrada del partido para que te puedas volver a tu casa. Supongo que es una forma de evitar tráfico en los alrededores pero oye, minipunto para Brisbane.
Espectáculo digno de Hollywood
Que ya sé que estoy en Australia pero yo todo lo comparo con una película americana. Vaya show, de verdad. Nada mas entrar, nos dio tiempo a echar un vistazo rápido porque justo empezaron con las presentaciones de los jugadores. Fueron nombrando uno a uno (supongo que a los del equipo local), mientras aparecían imágenes de ellos en pantalla y con cada nombre un poco de fuegos artificiales y juego de luces por todo el estadio. Todo muy épico.
Había mascotas de cada equipo y lógicamente animadoras, pero solo del equipo local. La mascota de los Broncos es un caballo y de los Rabbitohs un conejo. El conejo estaba un poco decaído el pobre, pero los caballos, que había dos, estaban arribísima dando vueltas por el campo animando y hablando con el público.
Empieza el partido
Mira yo no tengo ni idea de rugby, pero acabé entendiendo las normas básicas: cuando la pelota con forma de melón llega al otro lado, es un gol. Vaya tortas se daban. Yo no sé si vi un partido de rugby o un combate de boxeo, pero no estamos aquí para hablar de las jugadas, sino de LOS GOLES (o lo que quiera que se marque en rugby). Pero no de quién los marcó o cómo fue, eso nos da igual. Si no del show que se montaba cada vez que marcaba el equipo local.
Ponían una musiquita pegadiza con un baile simple, de esos que te aprendes en medio segundo, y TODO el estadio lo hacía. A todo esto, súmale baile de animadoras, fuegos y la guinda del pastel: una chica vestida de vaquero a caballo con la bandera del equipo dándole vueltas al campo. Yo no sabía para dónde mirar ya. Y esto pasó varias veces, porque ganamos. Sí, ganamos, porque íbamos con Brisbane.
Y como donde fueres haz lo que vieres, yo si veía aplaudir a gente con la camiseta de «nuestro» equipo, pues a tope con ello. Y así es como una se integra en algo de lo que no tiene ni idea.
Algo cultural para todos los públicos
Esto me sorprendió bastante a bien. Había gente de todas las edades y de todos los géneros. Familias, grupos de amigos, parejas. Es un evento para todo el mundo, y no gente como nosotros que van por el show. Gente con la camiseta, que sí que se sabe las normas, que está atenta al partido y que lo vive. Me gustó bastante que no sea «algo de hombres» como por desgracia pasa en otros deportes importantes.
Pues todo eso te cuento. Me encantó y creo que es un plan que merece mucho la pena. Además, está bastante bien de precio y no es que sea algo turístico pero es algo muy de aquí, así que ver un partido de rugby en Australia sí que debería ser un punto en el checklist de cosas que hacer en este país. Por lo pronto puedo decirlo: partido de rugby australiano, check.