En mi opinión, claro. Después de visitar el Templo Madre, fuimos a Tukad Cepung que estaba a mitad de camino para volver a Ubud. De la capital, estas cascadas están a 50 minutos en moto. Días antes habíamos visitado unas cascadas súper masificadas y nos daba miedo repetir la experiencia porque la verdad es que no nos gustó nada pero nada más lejos de la realidad. Tukad Cepung Waterfall, son para mí las cascadas más bonitas de Bali. No había apenas gente, el entorno natural en el que se encuentran es precioso y merece mucho la pena. Te cuento todo lo que tienes que saber:
Información práctica
Como te decía, están a 50 minutos de Ubud en moto pero si vas desde el Templo Madre, están a 40. Puedes dejar la moto gratis en la entrada aunque había poca sombra y después el sol había abrasado el asiento.
El precio de la entrada son 10.000 rupias (0,60€) y solo se puede pagar en efectivo. Bueno aquí la liamos parda. No nos quedaba efectivo y preguntamos a una señora de unos puestos de souvenirs si podíamos cambiar divisas en algún sitio cercano. Nos dijo que ella cambiaba y nos metió en la trastienda. Yo ya estaba viendo mis órganos en el mercado negro. Pero nada, nos ofreció un cambio muy malo y nos fuimos. Cuando ya nos íbamos, nos encontramos con dos chicos malagueños sentados al lado de nuestra moto, nos pusimos a hablar, y se ofrecieron a pagarnos la entrada. Al fin y al cabo, a nuestro cambio no era nada. Gracias amigos malagueños simpáticos allá donde estéis.
Había varios puestos de souvenirs, como en todas partes en Bali, y un restaurante con una entrada bastante llamativa.

Ruta de acceso a las cascadas
Una vez pagamos la entrada, empezamos a caminar. Para llegar a las cascadas, hay que andar un poquito la verdad, pero merece la pena. Empezamos a bajar escaleras, atravesar caminos, seguir el sonido del agua…No tiene pérdida, y me encantó. Además, apenas nos cruzábamos gente y ya nos íbamos imaginando que estas cascadas no estarían tan masificadas como las anteriores que habíamos visitado.

A mitad de escaleras, que eran bastantes, había un par de restaurantes con pufs que la verdad invitaban a tomarse un batido de frutas, pero seguimos adelante.
Una vez en la zona de abajo, ya empezamos a caminar dentro del agua que había que atravesar para llegar a las cascadas. Así que antes de llegar, ya te tienes que mojar. Nos quitamos la ropa y fuimos en bikini con la mochila. El mejor calzado para estas cascadas es uno agarrado al pie, yo llevo sandalias deportivas y las mojo, y lo mejor que pude llevar.

Las cascadas de Tukad Cepung
Pues eran dos cascadas y una cueva. Está todo indicado con flechas; hacia una dirección teníamos unas mini cascadas, y en la otra las grandes. Fuimos a ver las pequeñas y es que no había casi gente. Pero nada, fue ver y continuar. Por el camino vimos el acceso a la cueva pero la verdad es que no nos quisimos meter.

Seguimos el camino, teníamos ganas de llegar a las cascadas grandes que ya se escuchaba el rugir del agua bastante cerca. Y ahí estaban, las Tukad Cepung Waterfall, unas cascadas que caían en mitad de una cueva, bastante altas creando una piscinita en la zona inferior.

No había apenas nadie, pero es cierto que la gente no estaba pasando el rato bañándose tranquilamente. La gente iba a hacerse la foto. De hecho, se creó una pequeña cola (unas 4 personas) y nos hicimos las fotos los unos a los otros.

Justo enfrente, había una roca enorme que es que no lo pude evitar y caí en el postureo, lo confieso. Esto era precioso.

Una piscina algo menos natural
Cuando volvíamos ya, vimos algo que no habíamos visto al bajar: una piscina de obra. Es decir, el agua que caía era natural pero esa piscina estaba construida artificialmente vaya. Ahí sí que estuvimos un rato tranquilas, relajándonos con el sonido del agua al caer, las hojas que se movían, y los pájaros.

Bajo mi punto de vista, las cascadas Tukad Cepung son una parada obligatoria en un viaje a Bali. Es cierto que la mayoría de la gente va por la foto, pero es que no hay tantísima gente como en otras cascadas. Además no es solo el agua, es el paisaje de la ruta que hay que hacer para llegar. No me gusta que cobren en un lugar natural, porque no deja de ser un chico con una mesa que se ha plantado ahí y no te deja pasar si no le pagas, y hacen de todo un circo. Pero bueno, si buscas unas cascadas en Bali sin mucha gente, las Tukad Cepung son una muy buena opción.