En mayo de este año los aviones me llevaron a Londres. Bueno, más bien me llevaron a Liverpool por Eurovisión, pero ese es otro tema. Estando en UK, cómo no íbamos a ir a la capital. Teníamos poco tiempo; llegamos un domingo por la noche y nos fuimos el miércoles por la tarde así que aunque fueron 3 noches…más bien fueron 2 días y medio (lo que viene siendo un fin de semana) pero lo quisimos aprovechar. Aquí tienes nuestra escapada de 3 días en Londres y aviso, somos de andar, y Londres fue una paliza (es ENORME), pero optimizando el tiempo se pueden ver muchas cosas. Let’s go!
Cómo ir a Londres desde el aeropuerto
Londres tiene SEIS aeropuertos. Nosotras llegamos a Heathrow y yo salí desde Stansted.
La forma más económica para ir de Heathrow a Londres es en metro. Una vez en el aeropuerto, está indicado, y se puede pagar con la tarjeta Revolute sin necesidad de sacar ticket (cuesta 6,20€). Nosotras llegamos de noche, y hay metro toda la noche cada 10 minutos (Picadilly Line). Nos fuimos hasta Victoria, que era nuestra parada más cercana, y no tardó más de 20 minutos.
Para ir al aeropuerto de Stansted, compré online en esta web un billete de autobús por 22€. El trayecto dura 2 horas y te deja en la puerta de Salidas del aeropuerto. El autobús lo cogí a la salida de la estación de Victoria.
Transporte en Londres
Londres es una ciudad enorme, y sí o sí tendrás que usar el transporte público. Nosotras fuimos en metro desde el aeropuerto a la ciudad el primer día….y ya. El metro es CARÍSIMO. Nos movimos genial en autobús, el rojo de dos pisos, ese.
Mientras que un billete de ida en metro te cuesta 6,20€ el trayecto, el autobús cuesta 1,50€ y aunque tarda un poco más, la diferencia de precio es bastante grande y vas viendo la ciudad. Se paga con tarjeta en el mismo autobús al subir. Esto te estoy diciendo en billetes sencillos, pero hay bonos que si vas a estar más tiempo o moverte mucho, te puede compensar.
Día 1: Lo imprescindible de Londres
Ahora sí, vamos con lo que íbamos. El primer día nos vinimos arriba, es un hecho. Nos alojábamos en Victoria, muy cerquita de Buckingham Palace en un hostal (Colliers Hotel) que estaba muy bien de precio para la ubicación que tenía (pero no era el Rich, olía tirando a regular).
Buckingham Palace
Empezamos el día camino a Buckingham y yo que tú, de probar el English Breakfast, lo haría antes de llegar a la zona turística. 18€ nos clavaron por un huevo frito y dos trozos de bacon.
Cuando llegamos al palacio, empezó el cuadro. Sabía que se formaba espectáculo en el cambio de guardia, pero es que hacía solamente un mes de la coronación del príncipe Carlos y aún estaba todo triplemente decorado.
El cambio de Guardia es a las 11:00 de la mañana pero no es todos los días, depende de la época del año. Así que antes de ir, consúltalo si quieres verlo. (Que nosotras esto no lo sabíamos y justo fuimos a parar ahí a las 11:00h cuando empezaba, casualidades de la vida). La Guardia Real sale del palacio, se da una vuelta y vuelve a entrar, y eso se llena de muchísima gente.
St James Park
De ahí, atravesamos St James Park y siguió el espectáculo. En una esplanada estaba también la Guardia Real practicando con caballos para lo que según nos explicó un policía, la celebración de aniversario de la coronación del príncipe que era dentro de poco.
Picadilly Circus
Lugar emblemático donde los haya, lo que viene a ser el meollo de Londres. Cuando llegamos, estaban grabando una campaña publicitaria.
Toda la calle llena de banderas de Reino Unido, típicos autobuses rojos de dos plantas, taxis ingleses…A mí me pareció un decorado de película.
Trafalgar Square y National Gallery
En esta zona está todo bastante «cerca». De Picadilly fuimos a Trafalgar Square. Aquí es donde se venden entradas para los musicales de Londres ya que justo al lado está West End (lo que vendría a ser el Broodway londinense, la zona de los musicales). Nos quedamos con ganas de ver uno porque están los más famosos y a precios asumibles (desde 20€ las entradas más baratas), pero íbamos fatal de tiempo y no nos cuadraban los días. Para la próxima.
Una vez ahí, aprovechamos para visitar la Galería Nacional de Arte. Es gratuita, y cuenta con obras muy famosas como Los Girasoles de Van Gogh o Retrato de Giovanni Arnolfini y su esposa.
Chinatown
Después de la sesión de chicas cultas, nos fuimos a Chinatown a hacer lo que mejor sabemos, comer. Además de parada obligatoria en Londres, en este barrio hay restaurantes muy buenos bonitos y baratos pero ojo, que no en todos puedes pagar con tarjeta (por no decir que en muy pocos).
Nosotras fuimos directas a Eye Tokyo, porque nos lo habían recomendado. Es un japonés y sí, un acierto. Muy rico y muy bien de precio.
Big Ben y London Eye
De Chinatown nos fuimos caminando al Big Ben, son 20 minutos de paseo. Esta zona me encantó, y eso que es de estos sitios que tienes ya tan vistos porque son tan conocidos que hasta parece que ya has estado.
No falta la cola para hacerse la foto en la cabina con el Big Ben de fondo ni autobuses rojos por todas partes ni taxis british.
Al otro lado del río está el London Eye, que si quieres subir son 35€ que nosotras no quisimos pagar. Si quieres buenas vistas y gratis, en Londres hay varios miradores a los que puedes subir. El más conocido es Sky Garden, que es gratis, pero hay que reservar entrada antes.
Me llamó la atención que al lado del London Eye, habían creado un mural homenaje a las víctimas del Covid, y cada corazón representaba a una persona.
Paseo por el Támesis
Desde el London Eye fuimos dando un paseo junto al Támesis y de camino nos encontramos con el Tate Modern, el museo de arte moderno que además de ser gratis, en la última planta tiene un mirador con vistas. Mirador en Londres, check.
A 10 minutos, está Borough Market, uno de los mercados más antiguos de Londres con puestos de comida, flores y souvenirs.
Tower Bridge
El final del paseo antes de darnos la vuelta fue Tower Bridge, el famoso puente de torres azules tan emblemático, donde evidentemente aprovechamos para posturear todo y más.
La vuelta la hicimos también caminando, y por el camino paramos en barecitos bonitos que hay al borde del río. Como te puedes imaginar, este día acabamos muertísimas, y todavía quedaba mucho Londres por ver.
Acabamos en el Soho tomando algo, un barrio con bastante ambiente, restaurantes, y pubs, porque la cerveza local hay que probarla allá donde vayas. Qué caro es Londres, también te lo digo.
Este día cenamos un sushi para llevar y cenamos en el hotel antes de morir en paz.
Día 2: Notting Hill y Hyde Park
El segundo día caminamos bastante pero también cogimos autobuses para trasladarnos a puntos que queríamos ver, teniendo que descartar también algunos otros.
Harrods
Desde nuestro hotel, nos fuimos caminando a Harrods, uno de los centros comerciales más lujosos. Solamente una bolsa de Harrods ya cuesta 40€.
Aquí se concentran las marcas más exclusivas donde puedes encontrar un vestido por 60.000€ perfectamente. Como buenas Kardashian frustradas que somos nos recorrimos piso a piso de Harrods y aprovechamos para probar algún perfume.
He de decir que en el mercado de puestos de comida de la planta baja, había cosas bastante accesibles, como brochetas de carne por 2€ la unidad.
Hyde Park
De ahí, nos introdujimos en Hyde Park, el parque más grande de Londres (tiene más de 140 hectáreas de extensión). Nos quedamos con ganas de alquilar unas bicis y recorrer el parque de punta a punta pero lo apuntamos para el siguiente viaje.
En su defecto, fuimos a ver lo importante, o al menos lo que a nosotras nos interesaba:
- Estatua de Peter Pan
- Serpentine Lake: es el lago que cruza el parque.
- El memorial a Lady Di, que a mí me decepcionó. Una fuente, sin más.
- Kensington Palace: aquí residía la reina Victoria, y la princesa Diana hasta el día de su muerte. Durante 2021 y 2022 residieron también los Duques de Cambridge.
- Los jardines del palacio de Kensington Palace. Aquí se encuentra una estatua de Lady Di con sus hijos
Si vas con tiempo, además de lo que nosotras vimos, también puedes ver:
- Speaker’s corner: un punto donde se reúnen oradores a discutir sobre temas de actualidad y dar discursos
- Serpentine Gallery, una galería de arte contemporáneo.
- Marble Arch, un arco del triunfo que fue construido en sus orígenes como puerta de entrada a Buckingham Palace
- Memorial al príncipe Alberto, una estatua que dedicó la Reina Victoria a su marido.
- Arco de Wellington, un homenaje al Duque de Wellington por su victoria en la batalla de Waterloo.
Qué de cosas caben en un parque.
Notting Hill
La siguiente parada fue Notting Hill, el famoso barrio de casitas de colores y sí, fuimos caminando. Por el camino paramos en Churchill Arms, el pub más pintoresco de Londres. Tiene la fachada cubierta de flores, banderas y fotos de Churchill. A mí lo que más me llamó la atención no fue la decoración, que también, sino que la comida que sirven es pad thai. (????)
Una vez en el centro de Notting Hill, callejeamos por las casitas de colores, pasamos por la tienda de libros de la película «Notting Hill» de Julia Roberts, que en realidad es una tienda de souvenirs, y buscamos un sitio para comer. En las calles de este barrio hay un mercadillo de mil cosas que llama la atención, desde souvernirs, hasta artículos artesanales. Todo muy pintoresco.
Tengo que decir que las casitas de colores me decepcionaron un poco. No es que el barrio entero tenga las fachadas de colores intensos es que por un lado, son casas sueltas las que están pintadas y por otro lado, los filtros de instagram hacen mucho daño. No son para nada de colores tan intensos como los que yo había visto, y aquí te dejo un par de fotos sin filtro para que no te decepciones tú tampoco. Merece la pena dar una vuelta, pero no te esperes un arcoíris en las calles. O quizás soy yo, que soy muy exigente.
Comimos en Honest Burgers, una hamburguesería donde el camarero hablaba español y las hamburguesas estaban bastante buenas a buen precio (salimos a unos 15€). Acertamos con el sitio sin duda.
Desde aquí planteamos dos opciones teniendo en cuenta el tiempo. O íbamos a Abbey Road, el famoso paso de cebra de los Bettles, o al andén 9 y 3/4 de Harry Potter. Y optamos por la segunda opción.
Anden 9 y 3/4 de Harry Potter
De Notting Hill cogimos en Ladbroke Grove un autobús (sí, de los rojos de dos pisos) hasta Kings Cross. El trayecto duró poco más de 20 minutos y fuimos viendo zonas de la ciudad que caminando no habíamos visto.
Una vez en la estación, no veas la que tienen montada, que ni en Port Aventura. El típico carro «traspasando» la pared, está justo al lado de una tienda de recuerdos de Harry Potter. Hay perfectamente organizada una cola para hacerse la foto.
Lo mejor de todo, es que hay bufandas de cada casa de Harry Potter para que te las pongas para la foto, una chica que se encarga de lanzar la bufanda al aire para crear efecto de movimiento y un fotógrafo haciéndote la foto. Luego pasas por la tienda y ahí tienen puestas las fotos como en un parque de atracciones.
Lo bueno, es que puedes hacerte las fotos también con tu móvil sin ninguna pega, así que ninguna necesidad de comprar la foto después. Me sorprendió mucho el negocio que se ha formado alrededor del andén 9 y 3/4.
Oxford Street y Leicester Square
De Kings Cross nos fuimos dando un paseíto hasta Oxford Street y Leicester Square. En esta zona, están las famosas tiendas de Lego y M&M, donde entramos a ver qué se cocía. Madre mía, son tiendas de 3 pisos llenas de cosas para hacer por todas partes. Merece la pena entrar nada más que por verlo. La tienda de Lego tiene un Big Ben enooorme hecho de piezas de lego y la de M&M tiene un piso de cada color.
En Leicester Square hicimos un pequeño picnic en el cesped mientras se oía un concierto de un músico callejero, me gustó mucho esta zona. Además, esta plaza está rodeada de estatuas de películas, desde Peter Pan a Mary Poppins.
Nos recomendaron Boom Battle Bar en Oxford Street y allá que fuimos. Es un bar de recreativos pero es que tiene de todo: dardos, dianas de hachas, beer pong, billard, karaoke y algunos juegos que no conocía. Mucha gente joven, comida y bebida. Además está decorado bastante llamativo y es diferente y original.
A partir de aquí ya nos tomamos el día de relax, paseo y tiendas. Y te voy a dar el mejor tip de Londres que puede haber. Cena en el Primark. Que resulta que en el Primark de Oxford Street, en la segunda planta, hay un local de comida tirada de precio. Nos costó una porción de pizza y una coca cola 2,5 €. Loca me quedé.
Día 3: Camden Town
El último día solo teníamos la mañana para aprovechar ya que después de comer teníamos que irnos ya al aeropuerto, así que fuimos a Camden Town. Cogimos un autobús en Victoria en dirección a Northern. Hay salidas cada 2 minutos y llegamos en 20 minutos.
Camden Town es un lugar con ambiente alternativo lleno de arte y vida. Una de las cosas más icónicas es el Camden Lock Market, un laberinto de pasillos y callejones llenos de tiendas de ropa de segunda mano, joyas, souvenirs, cuadros…Hay creatividad en cada esquina.
Además, hay puestos de comida internacional que tienen una pintaza. Después puedes ir a Regent’s Canal y pasear por el canal.
Otra de las cosas más simbólicas de esta zona, son las fachadas de las tiendas o casas. Llaman muchísimo la atención y callejear por aquí te hace perder la vista en cualquier esquina.
Pues estos fueron nuestros 3 días en Londres. No salimos de fiesta (veníamos de un festival en Liverpool y estábamos reventadas), y nos quedaron muchas cosas por ver pero aún así, creo que fueron unos días muy bien aprovechados y nos pudimos llevar una idea generalizada de Londres bastante amplia. ¡Espero que te sirva nuestra escapada!